domingo, 4 de marzo de 2007

¿Perdemos el tiempo?


Desde hace poco, sale en la tele un anuncio de un coche, que te dice, que cada mañana, al despertarte, tienes 1440 minutos. Seguro que todos lo habréis visto, así que me ahorro la explicación, pero viene a decirnos, que aprovechemos el tiempo, porque al final del día, desaparecerá.

Y bien, a mí este anuncio me encanta, pero por otro lado me enerva. Me explico. Me encanta porque la primera vez que lo vi, me quedé pensando, era diferente, y era un anuncio de los que te hacía reflexionar. Me enerva. ¿Por qué? Porque me da rabia que usen esa reflexión tan buena para sólo venderte un coche. Si el anuncio se acabara cuando te dice que aproveches el tiempo, yo encantada. Pero no, te dice: “aprovecha el tiempo, compra este coche”. Al principio, pensé, qué anuncio más bueno, pero enseguida caí, que lo único que querían es que comprara el coche, e hiciera con mi tiempo lo que me diera la gana, como si quería hacer papiroflexia. Ese anuncio, insignificante a nivel del universo, es un reflejo de la sociedad de hoy, cada uno va a lo suyo, y sólo quieren conseguir sus objetivos, usando lo que sea. Igual que el de el seguro médico Sanitas, que el adorable niño sólo pide para Reyes que “su hermano se cure”. Lo único que quieren es vender, y nuestras vidas les dan igual. Cuanto más te cale el anuncio, mejor.

Pero bueno, dejemos el tema de la publicidad y centrémonos en el mensaje en si. Como iba diciendo, me hizo reflexionar acerca de lo que hacía yo con mi tiempo, y ahí es cuando me surgió el dilema. ¿Desperdicio yo mi tiempo? Cuando estoy un día festivo sin salir de casa, solo vagando sin rumbo, sin estudiar, pensando en mis cosas, mirando al vacío, y sin hacer nada en especial, ¿estoy perdiendo el tiempo? He llegado a la conclusión de que no, de que nunca pierdo el tiempo, es algo que necesito, no siempre tenemos que estar haciendo algo. Hacer nada también es algo, y no estoy desaprovechando mi tiempo. Otra cosa es que no cumpla con mis obligaciones, pero eso ya es otro cantar. O eso creo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando tú no estas las mañanas se tiñen de canciones tristes,
son como el leve perfume que por un instante te baña y te marca.
Cuando tú no estas las mañanas se tiñen de canciones tristes.
Rastro, huella de los pasos errantes,
del buscador de señales
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de olvido
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de cariño
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
Cuando regresas las mañanas levantan el vuelo
quizá es el momento de la brisa suave
que acaricia con tu llegada hasta tu partida.
Si regresas las mañanas se visten de alegres canciones.
se disfrazan de sonrisas,
son el hálito justo que apaciguara el pulso.
Son la broma o la mano del destino.
Si tú regresas las mañanas se visten de alegres canciones.
Rastro, huella de mi búsqueda errante,
que sin ti no encuentro señales
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de olvido
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de cariño
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido



morenita

Anónimo dijo...

Nunca perdemos el tiempo.

Sin embargo no siempre lo utilizamos para cumplir nuestros deberes,por lo cual a este hecho se le denomina erroneamente: "Perder el tiempo"

meripops dijo...

estuvo muy bien señora Aurora